¿Estás 100% seguro de que tu perro vendría si lo llamas en mitad del parque?

Si dudas… es que algo falla.
Descubre el método para que tu perro te elija, incluso entre charcos, pelotas y otros perros.
Y que tú respires tranquilo sabiendo que volverá.

No es que tu perro pase de ti.

Es que tú no le has enseñado lo que esa palabra significa.

Y no es culpa tuya.
Porque nadie te lo explica así.

Pero hoy te toca verlo claro:

Si cada vez que le llamas, él duda o directamente te ignora…
Si vienes cruzando los dedos cada vez que lo sueltas…
Si solo responde en casa pero desaparece en cuanto hay distracciones…

…entonces no tienes una llamada.

Tienes un a ver si hay suerte.

Y aunque hoy no pase nada…
Sabes que no siempre va a salir bien.

Porque algún día puede haber un susto.

Un cruce inesperado. Un perro reactivo.

O simplemente… que no te escuche cuando más lo necesitas.

Por eso esta formación no es sobre control.
Es sobre conexión.

Una llamada fiable no es un truco.
Es la prueba de que tú y tu perro os entendéis de verdad.

De un audio de WhatsApp a la “llamada perfecta”

Lunes a las 23:17.

Marta Golden
(Asi guardo a los clientes)

Mensaje de voz.

“Álvaro, estoy harta. Zar me mira, se ríe (sí, se ríe) y sale disparado detrás de las palomas.”

Al día siguiente nos plantamos en ese mismo parque. Nada de teorías raras ni promesas vacías. Solo tres cosas muy simples:

Convertir la palabra “ven” en algo que de verdad le compense.
Cambiar el momento de la llamada (no cuando el perro está “on fire”, sino justo antes).
Premiar y soltar: venir no podía significar fin de la fiesta.

Los primeros diez minutos fueron caos.
Zar seguía el olor, Marta tensaba la correa… y yo hacía de árbitro zen.

Al undécimo minuto, click: prueba, premio, liberación. Repetimos cuatro veces más y el Golden empezó a girar la cabeza cada vez que Marta respiraba hondo.

En una semana de práctica consciente cambiará esto

Vendrá a la primera. Se acabó el “¡VEN-ven-ven-VEN!” mientras sudas frío.
Paseos sin tensión. Correa floja, mirada relajada y cero carreras detrás de palomas.
Comando = fiesta, no bronca. Tu perro asociará “ven” con algo que le compensa, siempre.
Distracciones bajo control. Técnicas para que olores, gatos y pelotas jueguen a tu favor.
Método escalable. De la alfombra del salón al parque lleno de estímulos… sin saltos de fe.
Confianza de por vida. Tú respiras tranquilo; él te elige aun cuando todo lo demás tira fuerte.

Todo en 7 vídeos breves, aplicables desde el primer minuto.

¿Qué hay exactamente dentro?

0 – ¿Por qué no viene cuando lo llamo?

Detecta los 4 fallos que sabotean la llamada y cambia el “chip” mental.
Resultado: dejas de gritar “¡ven!” en piloto automático.

1 – Entiende al perro que tienes delante

Genética, instinto y personalidad: el triángulo que determina cómo motivarlo.
Resultado: descubres qué refuerzo le vuela la cabeza a TU perro.

2 – Antes de entrenar: vínculo, emoción y lenguaje

Cómo comunicarte con menos palabras y más coherencia.
Resultado: tu perro empieza a mirarte antes de que le hables.

3 – Construcción de la llamada (paso a paso real)

Palabra → premio → liberación: la secuencia que le da sentido a la llamada.
Resultado: pasa del salón al jardín con un 90 % de éxito.

4 – Generalización: cómo hacer que funcione en la calle

Método “escaleras” para introducir distracciones sin romper nada.
Resultado: responde con correa larga y puedes empezar a soltarlo con confianza.

5 – Casos difíciles y perros que no responden nunca

Resetea palabras contaminadas y perros “sordos selectivos”.
Resultado: conviertes el “ni caso” en atención voluntaria.

6 – Juegos y aplicaciones reales de la llamada

Escondite, micro-llamadas cotidianas y carreras controladas.
Resultado: mantienes la llamada viva sin entrenos extra.

Preguntas que me suelen hacer

Venga, Profe, deja de enrollarte… ¿Cuánto me va a costar esto?

Ok, directo al grano:

Si te lo diera en sesiones 1-a-1 serían 6 clases a formación completa por 500€.
(Obviamente no veriamos solo la llamada pero…)

Y aun así dependerías de mi agenda, de tu agenda… y de que el perro tenga el día bueno.

Para evitar dramas grabé todo en 7 vídeos cortos que te puedas ver las veces que quieras y cuando quieras.

Hice números, quité el postureo y lo dejé en:

79 € IVA incluido.
Pago único.
Fin.

Que Venga porque Quiere
Scroll al inicio